Saturday, August 05, 2006

Carta al Éxodo de Jorge Icaza

Y el indio murió...

Es poco probable que haya ido al cielo si me preguntan (lo más probable es que por ser realismo social, es tan apegado a la realidad que es más factible que el cielo no exista). Si, además, el estereotipo es uno, la imagen que uno proyecta ante el patrón blanco, ante la guarmi, ante el destino que cojea al vernos maltrechos.

La naturaleza del sufridor brota ante cualquier circunstancia. Segundo Antonio Quishpe era un sufridor, así que o en el huasipungo o dueño del latifundio iba a ser infeliz. ¿Tenía que morir? realmente no lo sé, sólo en vida uno cree hacer lo que le da la gana.

La imagen se distingue de lo real mediante los sentidos, tocando, oliendo. Usando otros instrumentos que no engañen al paladar, en gran parte culpa de las cadenas de televisión. Espero hacerme entender, pero no me pregunten por mi identidad por sí misma, pues no tiene nada que ver con la tierra de los espíritus que me jalan los pies, una vez más, reclamándome un hogar.